Pilar of Autumn

Hablando contra la pared me rebota un monologo superfluo, como mirarse al espejo cada mañana alimentando la oralidad del ser, como esperar a que todos los semaforos te permitan hacer tal cosa, alimentandose de tu tiempo hasta empalagarse, combar las desiciones aparentando ser un debil de voluntad, sin creer en la suerte ni en conciencias superiores que demuestren garbosidad, obserbar las cafilas hordas de seres humanos que a una segunda impresion parecen animales de corral, todos tratan de sostener su atril, pero nadie se anima a leerlo y menos comprenderlo, se que es facil sentarse en un sofa a criticar, pero al parecer parece ser una desicion discriminativa entre eso o ser un oligofrenico absoluto ... picnico. En fin, desvelando mis ojos, oidos, pulmones y percepciones en esta acogedora madrugada me siento muy feliz, creo que estoy mimando un nuevo constructo, una especie de diario que la verdad puede leer todo el mundo como nadie, o por ahi algun ser inorganico desbordado de conciencia prerrogativa, estoy sano, enamorado, estable y entregado, la sensacion es un gran final dantesco, nunca habia estado muy feliz por tanto tiempo, y tan claro de que perdurara en una providencia benefactora tan calida como mirar y sentir al sol horizontal del camino de un campo rodeado de añejos arboles con hojas sepia, la verdad es mas felicidad por brindar eso a otro ser, un ser que sientes como si fuese tu realidad paralela.

Cruzo las calles pero no conozco mi futuro, aunque me gustaria mucho asegurarlo, puedo perder todas mis posesiones materiales, mi vida, redes sociales, el espejo emocional al que llamo guitarra, mi somnolencia, pero realmente me sentiria estaticamente vacio si pierdo mi amor, no me siento inseguro pero es claro que ese pensamiento es inevitable, ineludible, como sea, es triste, pero es una realidad completamente evitable.

La existencia te lo entrega todo, depende de uno saber aprovecharlo y expandirlo, aunque esa conclusion no es mi definicion del efimero destino, its your call men. Estoy agradecido del sufrimiento y las implosiones de angustia amarga, me enseñaron a disfrutar plenamente lo que desee disfrutar. Tengo hambre, pero satisfacerla es mas sublime obviamente si el hambre en si cada vez es superior, despues viene el trip de los detalles y tus propios gustos, y despues viene balancear las gulas del ello, el yo y el inecesario superyo. Me siento sano por que se que voy a enfermar.

Y asi los años pasan, las palabras se queman, las estaciones antojan, las bocas supuran y los ojos pestañean, pero deseo conservar esta simbiosis de amor y si es por mi que sea hasta el final del fin.

La locura solo el loco la disfruta.